ABIERTO DE AUSTRALIA
El tenis argentino quiere dar batalla en este Abierto de Australia y a pesar de muchas dificultades dos representantes siguen adelante. Diego Schwartzman con un triunfo sobre el serbio Filip Krajinovic, un triunfo importante pero con una mueca de preocupación por algunas molestias físicas. El argentino, 13° del ranking, se impuso por 6-3, 6-4 y 7-5 en 2 horas y 29 minutos de acción. En la próxima ronda, se enfrentará con el australiano Christopher O’Connell, que derrotó al francés Hugo Gaston por 7-6 (7-4), 6-0, 4-6 y 6-1
El peque comentó, .“De físico terminé bien. Tuve calambres, pero creo que fue los nervios. No es algo que tenga nada que ver con la preparación del partido ni con la hidratación, que son dos cosas que hago bien. No sé por qué se dio. Fui teniendo un par de tirones, hasta que esos calambres pasaron a mayores y me perjudicaron mucho para cerrar el partido más rápido. Por suerte, entre los errores de él y algunos aciertos míos lo pude terminar en tres sets. Si se alargaba, me iba a terminar complicando. No es la primera vez que pasa, pero no me cambia mucho, tengo casi 48 horas para descansar hasta el próximo partido”, comentó Schwartzman
“Siempre hay un punto para mejorar, pero eso te lo terminan dando los partidos. La mayoría de los jugadores no llegamos acá con muchos partidos; es el torneo el que te termina de poner a punto después de que la mayoría hace la pretemporada, y son los partidos los que te dan el ritmo y la velocidad. Pero siento que empecé bien, en Sydney me sentí muy rápido, pegando rápido, la de hoy era para una victoria buena y al final se me complicó”, agregó.
Otro argentino Sebastián Báez, quien se dio el gusto de celebrar su primer éxito en un torneo de Grand Slam con su victoria en cinco parciales sobre el español Albert Ramos. por 6-4, 4-6, 6-3, 1-6 y 6-2 en 3hora y 26mimutos de juego.