Nota Gabriel Matteazzi desde New York
El umpire Mohamed Lahyani se bajó de su silla para hablarle al australiano Nick Kyrgios que estaba nervioso, malhumorado, sin ganas de jugar, resistido por el publico. Le dijo, “Éste no sos vos; sos muy bueno para el deporte”.
Esto sucedio porque el jugador ya no devolvía siquiera la pelota en los servicios de su rival y entonces el juez sueco descendió de su silla y se acercó al jugador con la cabeza gacha. Paternal, comenzó a hablarle. “Quiero ayudarte. Éste no sos vos. Sos muy bueno para el deporte”, le dijo.
Ahora bien, en este tenis tan frío y calculador, que parece que todos los detalles estuvieran medidos por una regla de cálculo, que cada vez parece mas impersonal y que el olor del negocio está en todos lados: Esta mal que el umpire le hable a un jugador alterado y trate de calmarlo o hacerlo deponer de una actitud negativa?
Los organizadores del evento dijeron, «Después de una revisión exhaustiva conducida por los oficiales del US Open, se ha determinado que la conducta del juez de silla Mohamed Lahyani durante el partido de segunda ronda entre Nick Kyrgios y Pierre-Hugues Herbert fue más allá del protocolo», explicó la organización en un comunicado.
» Y se le ha pedido a Lahyani que se adhiera estrictamente a los protocolos en todos sus partidos de aquí en adelante».
«Lahyani continuará arbitrando en el US Open 2018. Su actuación seguirá siendo evaluada, como en el caso de todos los jueces de silla a lo largo del torneo».
No debemos olvidarnos que los tenistas son personas, con sentimientos y que en ocasiones pueden necesitar una palabra, como ocurre en otros deportes como el rugby, fútbol, por ejemplo, en el que los protagonistas hablan con los árbitros.