ABIERTO EE.UU. Nota Leo Canaparo -Director-
Dominic Thiem se quedó con el Abierto de los Estados Unidos al derrotar al alemán Alexander Zverev por 2-6, 4-6, 6-4, 6-3 y 7-6(6). De esta manera rompe con la hegemonía de los históricos, Roger Federer, Rafael Nadal y Novak Djokovic.
En el primer set todo fue del alemán con un dominio a voluntad con una estrategia muy simple y muy difícil de mantener por mucho tiempo en un partido: sacar muy bien con un alto porcentaje de primeros servicios y definir con la primera o segunda bola con tiros ganadores. Y le fue muy bien ya que ganó el 100% de los puntos cuando puso el primer saque en juego. Thiem esta atónito ya que no podía devolver el saque, no podía sentir la pelota en lo que más le gusta, los peloteos de fondo de cancha, porque fueron pocos, y además estuvo errático a la hora de tomar el control del punto. Luego del 6-2 en el segundo todo siguió igual hasta el 5-1 de Zverev, muy suelto, relajado y confiado. Pero como dijimos al principio era difícil saber cuanto aguantaría el alemán con su concentración jugando con tanta precisión. Y poco a poco empezó a bajar su eficacia de primeros servicios, y esto no solo significó que Thiem empezó a tomar confianza, sino que los puntos empezaron a ser mas largo con más desgaste físico, y en ese juego el austriaco se siente cómodo. Zverev ganó el segundo parcial 6-4 pero en el aire quedó flotando de que esto podía cambiar de rumbo. Y así fue a partir del tercero, con Thiem dominando el control de los puntos, con Zverev desgastando en cada corrida y además ese desgaste lo llevaba a cometer muchas dobles faltas. El tercero fue para Thiem por 6-4 y los que miramos el partido por medios digitales y los pocos que estaban en el estadio sabíamos que quedaba mucho por jugar en el Arthur Ashe.
En el cuarto set, si bien el tramite fue parejo Zverev siguió fallando sus primeros servicios, que empezaron a ser algo que aparecia de vez en cuando y el quiebre siempre estuvo cerca por aparecer y ocurrió en el octavo game para el 5-3 que Thiem cerró con un juego muy solido para quedar 6-3 y sets iguales.
El lenguaje corporal de ambos había cambiado desde el tercer set, Zverev ya no se movía y Thiem poco a poco tomó el control de todo, desde los puntos, los momentos y lo anímico. Quebró rápidamente para arrancar 1-0.
Luego vino un quiebre para Zverev y la cosa se niveló. Ese impulso anímico le sirvió a Zverev para recuperar el aire y nivelar el partido que llegó al dramático tie break en donde el coraje de Thiem volvió a aparecer para quedarse con el torneo